Macron afirmó en la red social X: "Fiel ao seu compromisso histórico com uma paz justa e duradoura no Médio Oriente, decidi que a França reconhecerá o Estado da Palestina". Subrayó la necesidad de un alto el fuego inmediato, la liberación de rehenes y la desmilitarización de Hamás. La decisión fue duramente condenada por Israel y Estados Unidos. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, calificó la medida como una "recompensa al terror" que arriesga crear "mais um agente iraniano, tal como Gaza se tornou". El secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, la tildó de "irresponsable" y perjudicial para la paz, mientras que el presidente Donald Trump desestimó su importancia, afirmando que "o que Macron diz importa pouco". Por el contrario, Hamás aplaudió la decisión como "um passo positivo na direção certa", y el primer ministro español, Pedro Sánchez, celebró la adhesión de Francia a la iniciativa. En Portugal, el ministro de Asuntos Exteriores, Paulo Rangel, consideró el anuncio "relevante", pero recordó que Portugal es un "estado soberano" y que su política no se define por otros, aunque el país "sempre esteve aberto e estará a este reconhecimento", pendiente de una conferencia internacional sobre la solución de dos Estados.
